Hace algunos ayeres cuando iba en segundo semestre, nos dejaron leer un libro y de ese libro sacar un tema y hacer un ensayo sobre el tema que seleccionamos. Yo leí El Complot Mongol y le tema que escogí fue la Muerte y después de unos buenos toques (jajaj, no es cierto) esto fue lo que salió. Pero antes kiero advertirles que èl pekeño cuento ke presede al ensayo esta bajo deerechos de autor, asi que si alguno de ustedes lo compia o plajia lo demado jajajaja y no es broma. Ahora sì disfruten mi pequeño cuento y my fumado ensayo y si no les gusta y creyeron que fue una perdida de timepo pues nimodo
Cuento : Lucharan a una caída…
Lucharan a una caída sin limite de tiempo, en una lucha en donde se juega el todo por el todo, del bando técnico de mascara calzoncillo y botas verdes, la que cuando se tiene se desperdicia y cuando no se tiene se desea: ¡la vida!; del bando rudo enlutada pálida y fría perenne y siempre puntual, toda de negro, sólo huesos y nada más, ella es la mismísima ¡muerte!
La lucha comienza en el encordado, la vida toma a la muerte y la avienta con furia a las cuerdas, la muerte rebota en las cuerdas, se acerca la vida corriendo y le de un “pierrotazo”, la muerte queda tendida en la lona, la vida se trepa a la tercera cuerda se lanza con mortal hacia delante y cae sobre la muerte haciéndole la guillotina, la vida toma de nuez a la muerte y la avienta a las cuerdas, la muerte rebota, la vida se acerca corriendo, pero la muerte seca de la chistera una patada voladora, y lanza a la de verde fuera del ring, ahora la muerte se trepa a las cuerda, y vuela, para caer encima de la vida, la vida esta tirada, ¡Qué hace la muerte!, esta tomando un silla, la vida se para, y la muerte la vuelve a tumbar con un sillazo en la cabeza, ¡huy!, eso debió doler, la muerte carga a la vida y la avienta al ring, la vida no se puede parar aún del sillazo recibido, la muerte de nuevo en las cuerdas, se lanza, en el aire da doble gira hacia delante, pero la vida se quita y la muerte se da duro contra la lona, esta muerte debe estar pegada con cola loca que no se le despega ningún huesito, la vida aprovecha y le hace la “rota virus” a la muerte, el referí cuenta, uno dos…la muerte se logra safar, le enlutada y la de verde se meten en un juego de manos, por fin la muerte toma a la vida y le hace el “puente olímpico”, esta muerte se tomo enserio lo de no hacer murallas sino construir puentes, el réferi cuenta uno, dos… la vida se retuerce como pez fuera del agua, y se logra safar, ahora es la vida la que toma a la muerte y ¡Qué esta haciendo!, sí señoras y señores, niños y niñas, chiquillos y chiquillas, eso que están viendo es la “Atlántida “, el réferi cuenta: uno, dos, tres fuera, fuera, fuera, la vida gana, èsta noche la vida ganó…
Escuchas el despertador, no te quieres levantar pero sabes que lo tienes que hacer, te levantas, prendes la luz, ves tu sombra que se expande por el suelo, inconcientemente piensas que la sombra es el alma, vas al baño, te mojas la cara con agua fría, para despertar mejor, para bañarse no hay tiempo, te ves en el espejo tomas noción de ti, pero no le das importancia ayer también te viste y antier y ante antier, te vistes rápido, te pones lo primero que encuentra, no importa que sea lo mismo que usaste ayer, hueles la ropa no huele feo la vuelves a usar, la lavaras mañana, o pasado o pasado que mas da, para eso existe el perfume, vendito el que lo invento, desayunar quita mucho tiempo, en el camino compraras un yogur y una barra de cereales, agarras tu dinero, credenciales, tu acreditación, tu grabadora, pilas, ah y claro los cigarros y encendedor no se te pueden olvidar, abres , sales, cierras , caminas, un día más de trabajo, un día máx. de vida, aprovéchalo, disfrútalo, que mañana, la muerte puede ser quien gane la caída.
LA MUERTE
El hombre por siglos a intentado interpretar la muerte sin embargo sus
esfuerzos han sido en vano pues no ha logrado entender que para interpretar la
muerte primero tiene que afrontar la vida para interpretarla y después poder
interpretar la muerte.
Es difícil definir la muerte pues hay diversas definiciones filosóficas y científicas
y estas definiciones no dejan de ser especulaciones, puesto que nadie ha
estado muerto y vuelto a la vida para poder decir como es la “vida” en la muerte
La humanidad ha basado su existencia en ciclos que señalan un comienzo y
un final y este final no ha tenido el significado del fin, el termino de todo, sino
que el hombre, le ha dado el significado de cambio, regeneración, resucitación,
significado que el hombre le ha dado por medio de la fe, de la religión,
promedio de la cual el hombre ha divinizado la muerte y de esta forma el
hombre hace de la muerte una esperanza, por que al llegar a la muerte se deja
el mundo del sufrimiento y dolor y se llega a un mundo en donde eso no existe,
así la muerte un proceso biológico pasa a ser un rito que intenta cumplir las
necesidad que el hombre tiene de esperanza.
La muerte al parecer es un proceso biológico, pero como escribió Mario
Monteforte Toledo, en su cuento Los inventores de la muerte: “El hombre sólo
puede ser divino si crea algo no creado por su Dios, algo que lo hará cuidar la
vida, algo que se ignorará hasta extinguirse, si nosotros no lo descubrimos
Nada puede durar para siempre, y sobre todo el ser humano. El hombre sólo
puede ser divino si crea algo no creado por su Dios”[1], en este cuento Caín
mata a Abel y se da la primera muerte registrada en la historia, y como dice el
cuento el hombre fue el inventor de la muerte y al inventarla se divinizo a èl y a
la muerte, talvez el hombre creó a la muerte como una escapatoria de las
circunstancias de la vida, o para tener un equilibro, pues si la muerte no
existiera que aburrido seria vivir para siempre, y esto nos lleva a decir
como Shakespeare diría, “desde que nacemos empezamos a morir”, no
vivimos para morir, ni morimos viviendo, simplemente, vivimos una vida-muerte
por que uno no muere por enfermedad o accidente sino por haber nacido, el
primer encuentro con la muerte es la vida.
La doctora Elizabeth Kòblerkoss desarrolla un esquema de las 5 fases por las
que atraviesa un paciente en fase terminal, negación, ira, regateo que para
fines de este ensayo cambiaremos por Indirefencia, depresión,
aceptación[2]. Y ¿Qué no somos todos enfermos en fase terminal?, enfermos
de vida, por lo que tratare de explicar estas etapas medicas emparejándolas a
diferentes actitudes que el hombre toma ante la muerte.
Negación: Octavio Paz en el Laberinto de la soledad menciona que, “…para el
habitante de Nueva York, Paris o Londres, muerte es la palabra que jamás se
pronuncia …“[3], esto porque el estilo de vida primer mundista no deja pensar en
la muerte, el tiempo esta completo con las largas jornadas de trabajo, y
después de eso llegar a casa a descansar y distraerse del trabajo por medio
del entretenimiento, el consumismo y el llenar los estandares de vida que
impone la publicidad, de esta forma se ignora a la muerte negándola y al negar
a la muerte niegan la vida, pues tratan de vivir una vida que no es la suya, una
vida que se impone por los medios de comunicación. En el estado de negación
no se acepta la idea de la muerte y se suplanta por la idea “disfrútala vida”,
pero se les olvida decir “mientras puedas”
Ira: Esta fase o actitud puede ser temporal y se da cuando un individuo se
enfrenta a la muerte por el fallecimiento de alguien cercano a él. Esta actitud se
manifiesta en una agresión verbal ante Dios y ante la vida pues ya no se puede
valorar la vida por que se ha perdido a alguien que era parte de esa vida diaria
En esta actitud es importante mencionar que la ira también se puede dar por
que el individuo se da cuenta que la muerte es real y esta cerca y sabe que
algún día le tendrá que pasar y saca su ira como muestra de negación, sin
embarco esta etapa se puede superar con el tiempo, pues el tiempo cura la
heridas, o con ayuda sicológica, para que el individuo pase a la etapa ideal: la
Aceptación.
Indiferencia: Haciendo referencia de nuevo a Octavio Paz y a su libro El
Laberinto de la Soledad, la indiferencia es la actitud que el mexicano toma
hacia la muerte y hacia la vida “La indiferencia del mexicano hacia la muerte
se nutre de su indiferencia hacia la vida. El mexicano no sólo postula su
intranscendencia del morir, sino la del vivir.”[4] Cosa en la que con todo respeto
a Octavio Paz no estoy de acuerdo, por que si bien, sí, el mexicano es
indiferente hacia muchas circunstancias que pasan en su país y de la vida,
pero su celebración del día de muertos es un tiempo para recordar que, en
medio de un mundo que parece haber eliminado a la muerte, esta es nuestra
única compañera de camino perenne y siempre puntual, y ser concientes de
que algún día nos tocara bailar con la elegante catrina; el día de muertos es un
recordatorio para todo hombre, que a pesar lo que sea o tenga sigue y seguirá
siendo un simple mortal: el día de muertos es un estado de mente diáfano que
permite al mexicano ser consiente y ver que la muerte es una certeza en medio
de un mundo en que las certezas del hombre se han desvanecido. Pero hay
otra clase de indiferencia y es la actitud que tomamos cuando nos enteramos
que alguien se murió y no conocíamos, alguien al otro lado del mundo o un
vecino que al que no le hablábamos esa, esa indiferencia existe por que esa
persono no formaba parte de nuestra vida
Depresión: Esta actitud se presenta en gente que tiene alguna enfermedad
terminal, o es de avanzada edad, pues ellos saben que en viven como dice un
famoso refrán “más haya que pa`ca”, aunque no necesariamente gente con
enfermedades terminales, muren antes que al quien que no se le haya
detectado enfermedad alguna, ya que ha habido casos en que un enfermo
terminal es diagnosticado con ciertos días o años de vida y rompe con ese
diagnostico, ahora bien los adultos mayores, ellos caen en la depresión pues
su ciclo biológico se acerca y parece que tiene un olor propio pues al ve o
mejor dijo oler a un viejito la gente se aleja de ellos pues huelen a muerte l
Aceptación: Tarde o temprano todos llegamos a tener esta actitud ante la vida,
enfermos terminales, viejos gente sana, todos, pero para llegar a esta etapa,
fase o actitud como se le quiera llamar tenemos que pasar por un proceso de
autoconocimiento de uno mismo y de la vida y cómo llegar a este sino
afrontando la vida y las circunstancias que nos rodean y qué es la vida sino una
serie de momentos, momentos que se van juntando para conformar una vida,
solo aprovechando estos momentos, lo que somos y lo que nos pasa
entenderemos la vida y claro dejando de querer dando explicación a todo y
simplemente creerlo, saber y creer que estas vivo y que morirar
Y a todo esto ¿Qué es la muerte?, médicamente es extinción, termino de la
vida, etapa final del crecimiento, cese de las funciones vitales, muerte cerebral,
la muerte no es una enfermedad que necesite intervención medica, la muerte
es el final de la vida humana, la muerte igual puede ser, un reflejo de nuestra
actitud ante la vida, la depositaria de nuestra esperanza…o lo que queramos
que sea, pero un grave error del hombre es querer vivir la muerte sin haber
aprendido a vivir la vida, por que si seguimos empeñados en saber como es la
muerte no seremos mas que no vivos y no muertos y haríamos realidad lo que
alguna vez dijo Man Ray respecto a los que aún estamos aquí y los que ya se
fueron , no existe en realidad un abismo insondable entre el que mira y el que
es mirado.
No recuerdo en donde leí que así como se cree que todos tenemos un ángel de
la guarda todos tenemos una muerte que siempre nos acompaña, si es así no
lo sé pero prefiero creer que todos y cada uno es la muerte y todos y cada uno
es la vida como escribiera el poeta Cesare Pavese:
''Vendrá la muerte y tendrá tus ojos/ esa muerte que nos acompaña/ de la mañana a la noche, insomne,/ sorda, como un viejo remordimiento/ o un vicio absurdo. Tus ojos/ serán una palabra vana,/ un grito acallado, un silencio./ Así los ves cada mañana/ cuando te inclinas sola ante el espejo./ ¡Oh querida esperanza, también nosotros aquel día/ sabremos que eres la vida y la nada!/ La muerte tiene una mirada para todos./ Vendrá la muerte y tendrá tus ojos./ Será como abandonar un vicio,/ como ver que emerge de nuevo/ un rostro muerto en el espejo,/ como escuchar un labio cerrado./ Descenderemos al remolino mudos."
[1] Fragmento del cuento Los inventores de la muerte, publicado en La Jornada el 13 de febrero del 2000
[2] Revista de ciencia y cultura Longevidad, año 1 No. 6, pags. 52 a 56
[3] El Laberinto de la soledad, Cátedra Letra Hispánicas, pag 195
[4] El Laberinto de la soledad, Cátedra Letra Hispánicas, pag 195
Cuento : Lucharan a una caída…
Lucharan a una caída sin limite de tiempo, en una lucha en donde se juega el todo por el todo, del bando técnico de mascara calzoncillo y botas verdes, la que cuando se tiene se desperdicia y cuando no se tiene se desea: ¡la vida!; del bando rudo enlutada pálida y fría perenne y siempre puntual, toda de negro, sólo huesos y nada más, ella es la mismísima ¡muerte!
La lucha comienza en el encordado, la vida toma a la muerte y la avienta con furia a las cuerdas, la muerte rebota en las cuerdas, se acerca la vida corriendo y le de un “pierrotazo”, la muerte queda tendida en la lona, la vida se trepa a la tercera cuerda se lanza con mortal hacia delante y cae sobre la muerte haciéndole la guillotina, la vida toma de nuez a la muerte y la avienta a las cuerdas, la muerte rebota, la vida se acerca corriendo, pero la muerte seca de la chistera una patada voladora, y lanza a la de verde fuera del ring, ahora la muerte se trepa a las cuerda, y vuela, para caer encima de la vida, la vida esta tirada, ¡Qué hace la muerte!, esta tomando un silla, la vida se para, y la muerte la vuelve a tumbar con un sillazo en la cabeza, ¡huy!, eso debió doler, la muerte carga a la vida y la avienta al ring, la vida no se puede parar aún del sillazo recibido, la muerte de nuevo en las cuerdas, se lanza, en el aire da doble gira hacia delante, pero la vida se quita y la muerte se da duro contra la lona, esta muerte debe estar pegada con cola loca que no se le despega ningún huesito, la vida aprovecha y le hace la “rota virus” a la muerte, el referí cuenta, uno dos…la muerte se logra safar, le enlutada y la de verde se meten en un juego de manos, por fin la muerte toma a la vida y le hace el “puente olímpico”, esta muerte se tomo enserio lo de no hacer murallas sino construir puentes, el réferi cuenta uno, dos… la vida se retuerce como pez fuera del agua, y se logra safar, ahora es la vida la que toma a la muerte y ¡Qué esta haciendo!, sí señoras y señores, niños y niñas, chiquillos y chiquillas, eso que están viendo es la “Atlántida “, el réferi cuenta: uno, dos, tres fuera, fuera, fuera, la vida gana, èsta noche la vida ganó…
Escuchas el despertador, no te quieres levantar pero sabes que lo tienes que hacer, te levantas, prendes la luz, ves tu sombra que se expande por el suelo, inconcientemente piensas que la sombra es el alma, vas al baño, te mojas la cara con agua fría, para despertar mejor, para bañarse no hay tiempo, te ves en el espejo tomas noción de ti, pero no le das importancia ayer también te viste y antier y ante antier, te vistes rápido, te pones lo primero que encuentra, no importa que sea lo mismo que usaste ayer, hueles la ropa no huele feo la vuelves a usar, la lavaras mañana, o pasado o pasado que mas da, para eso existe el perfume, vendito el que lo invento, desayunar quita mucho tiempo, en el camino compraras un yogur y una barra de cereales, agarras tu dinero, credenciales, tu acreditación, tu grabadora, pilas, ah y claro los cigarros y encendedor no se te pueden olvidar, abres , sales, cierras , caminas, un día más de trabajo, un día máx. de vida, aprovéchalo, disfrútalo, que mañana, la muerte puede ser quien gane la caída.
LA MUERTE
El hombre por siglos a intentado interpretar la muerte sin embargo sus
esfuerzos han sido en vano pues no ha logrado entender que para interpretar la
muerte primero tiene que afrontar la vida para interpretarla y después poder
interpretar la muerte.
Es difícil definir la muerte pues hay diversas definiciones filosóficas y científicas
y estas definiciones no dejan de ser especulaciones, puesto que nadie ha
estado muerto y vuelto a la vida para poder decir como es la “vida” en la muerte
La humanidad ha basado su existencia en ciclos que señalan un comienzo y
un final y este final no ha tenido el significado del fin, el termino de todo, sino
que el hombre, le ha dado el significado de cambio, regeneración, resucitación,
significado que el hombre le ha dado por medio de la fe, de la religión,
promedio de la cual el hombre ha divinizado la muerte y de esta forma el
hombre hace de la muerte una esperanza, por que al llegar a la muerte se deja
el mundo del sufrimiento y dolor y se llega a un mundo en donde eso no existe,
así la muerte un proceso biológico pasa a ser un rito que intenta cumplir las
necesidad que el hombre tiene de esperanza.
La muerte al parecer es un proceso biológico, pero como escribió Mario
Monteforte Toledo, en su cuento Los inventores de la muerte: “El hombre sólo
puede ser divino si crea algo no creado por su Dios, algo que lo hará cuidar la
vida, algo que se ignorará hasta extinguirse, si nosotros no lo descubrimos
Nada puede durar para siempre, y sobre todo el ser humano. El hombre sólo
puede ser divino si crea algo no creado por su Dios”[1], en este cuento Caín
mata a Abel y se da la primera muerte registrada en la historia, y como dice el
cuento el hombre fue el inventor de la muerte y al inventarla se divinizo a èl y a
la muerte, talvez el hombre creó a la muerte como una escapatoria de las
circunstancias de la vida, o para tener un equilibro, pues si la muerte no
existiera que aburrido seria vivir para siempre, y esto nos lleva a decir
como Shakespeare diría, “desde que nacemos empezamos a morir”, no
vivimos para morir, ni morimos viviendo, simplemente, vivimos una vida-muerte
por que uno no muere por enfermedad o accidente sino por haber nacido, el
primer encuentro con la muerte es la vida.
La doctora Elizabeth Kòblerkoss desarrolla un esquema de las 5 fases por las
que atraviesa un paciente en fase terminal, negación, ira, regateo que para
fines de este ensayo cambiaremos por Indirefencia, depresión,
aceptación[2]. Y ¿Qué no somos todos enfermos en fase terminal?, enfermos
de vida, por lo que tratare de explicar estas etapas medicas emparejándolas a
diferentes actitudes que el hombre toma ante la muerte.
Negación: Octavio Paz en el Laberinto de la soledad menciona que, “…para el
habitante de Nueva York, Paris o Londres, muerte es la palabra que jamás se
pronuncia …“[3], esto porque el estilo de vida primer mundista no deja pensar en
la muerte, el tiempo esta completo con las largas jornadas de trabajo, y
después de eso llegar a casa a descansar y distraerse del trabajo por medio
del entretenimiento, el consumismo y el llenar los estandares de vida que
impone la publicidad, de esta forma se ignora a la muerte negándola y al negar
a la muerte niegan la vida, pues tratan de vivir una vida que no es la suya, una
vida que se impone por los medios de comunicación. En el estado de negación
no se acepta la idea de la muerte y se suplanta por la idea “disfrútala vida”,
pero se les olvida decir “mientras puedas”
Ira: Esta fase o actitud puede ser temporal y se da cuando un individuo se
enfrenta a la muerte por el fallecimiento de alguien cercano a él. Esta actitud se
manifiesta en una agresión verbal ante Dios y ante la vida pues ya no se puede
valorar la vida por que se ha perdido a alguien que era parte de esa vida diaria
En esta actitud es importante mencionar que la ira también se puede dar por
que el individuo se da cuenta que la muerte es real y esta cerca y sabe que
algún día le tendrá que pasar y saca su ira como muestra de negación, sin
embarco esta etapa se puede superar con el tiempo, pues el tiempo cura la
heridas, o con ayuda sicológica, para que el individuo pase a la etapa ideal: la
Aceptación.
Indiferencia: Haciendo referencia de nuevo a Octavio Paz y a su libro El
Laberinto de la Soledad, la indiferencia es la actitud que el mexicano toma
hacia la muerte y hacia la vida “La indiferencia del mexicano hacia la muerte
se nutre de su indiferencia hacia la vida. El mexicano no sólo postula su
intranscendencia del morir, sino la del vivir.”[4] Cosa en la que con todo respeto
a Octavio Paz no estoy de acuerdo, por que si bien, sí, el mexicano es
indiferente hacia muchas circunstancias que pasan en su país y de la vida,
pero su celebración del día de muertos es un tiempo para recordar que, en
medio de un mundo que parece haber eliminado a la muerte, esta es nuestra
única compañera de camino perenne y siempre puntual, y ser concientes de
que algún día nos tocara bailar con la elegante catrina; el día de muertos es un
recordatorio para todo hombre, que a pesar lo que sea o tenga sigue y seguirá
siendo un simple mortal: el día de muertos es un estado de mente diáfano que
permite al mexicano ser consiente y ver que la muerte es una certeza en medio
de un mundo en que las certezas del hombre se han desvanecido. Pero hay
otra clase de indiferencia y es la actitud que tomamos cuando nos enteramos
que alguien se murió y no conocíamos, alguien al otro lado del mundo o un
vecino que al que no le hablábamos esa, esa indiferencia existe por que esa
persono no formaba parte de nuestra vida
Depresión: Esta actitud se presenta en gente que tiene alguna enfermedad
terminal, o es de avanzada edad, pues ellos saben que en viven como dice un
famoso refrán “más haya que pa`ca”, aunque no necesariamente gente con
enfermedades terminales, muren antes que al quien que no se le haya
detectado enfermedad alguna, ya que ha habido casos en que un enfermo
terminal es diagnosticado con ciertos días o años de vida y rompe con ese
diagnostico, ahora bien los adultos mayores, ellos caen en la depresión pues
su ciclo biológico se acerca y parece que tiene un olor propio pues al ve o
mejor dijo oler a un viejito la gente se aleja de ellos pues huelen a muerte l
Aceptación: Tarde o temprano todos llegamos a tener esta actitud ante la vida,
enfermos terminales, viejos gente sana, todos, pero para llegar a esta etapa,
fase o actitud como se le quiera llamar tenemos que pasar por un proceso de
autoconocimiento de uno mismo y de la vida y cómo llegar a este sino
afrontando la vida y las circunstancias que nos rodean y qué es la vida sino una
serie de momentos, momentos que se van juntando para conformar una vida,
solo aprovechando estos momentos, lo que somos y lo que nos pasa
entenderemos la vida y claro dejando de querer dando explicación a todo y
simplemente creerlo, saber y creer que estas vivo y que morirar
Y a todo esto ¿Qué es la muerte?, médicamente es extinción, termino de la
vida, etapa final del crecimiento, cese de las funciones vitales, muerte cerebral,
la muerte no es una enfermedad que necesite intervención medica, la muerte
es el final de la vida humana, la muerte igual puede ser, un reflejo de nuestra
actitud ante la vida, la depositaria de nuestra esperanza…o lo que queramos
que sea, pero un grave error del hombre es querer vivir la muerte sin haber
aprendido a vivir la vida, por que si seguimos empeñados en saber como es la
muerte no seremos mas que no vivos y no muertos y haríamos realidad lo que
alguna vez dijo Man Ray respecto a los que aún estamos aquí y los que ya se
fueron , no existe en realidad un abismo insondable entre el que mira y el que
es mirado.
No recuerdo en donde leí que así como se cree que todos tenemos un ángel de
la guarda todos tenemos una muerte que siempre nos acompaña, si es así no
lo sé pero prefiero creer que todos y cada uno es la muerte y todos y cada uno
es la vida como escribiera el poeta Cesare Pavese:
''Vendrá la muerte y tendrá tus ojos/ esa muerte que nos acompaña/ de la mañana a la noche, insomne,/ sorda, como un viejo remordimiento/ o un vicio absurdo. Tus ojos/ serán una palabra vana,/ un grito acallado, un silencio./ Así los ves cada mañana/ cuando te inclinas sola ante el espejo./ ¡Oh querida esperanza, también nosotros aquel día/ sabremos que eres la vida y la nada!/ La muerte tiene una mirada para todos./ Vendrá la muerte y tendrá tus ojos./ Será como abandonar un vicio,/ como ver que emerge de nuevo/ un rostro muerto en el espejo,/ como escuchar un labio cerrado./ Descenderemos al remolino mudos."
[1] Fragmento del cuento Los inventores de la muerte, publicado en La Jornada el 13 de febrero del 2000
[2] Revista de ciencia y cultura Longevidad, año 1 No. 6, pags. 52 a 56
[3] El Laberinto de la soledad, Cátedra Letra Hispánicas, pag 195
[4] El Laberinto de la soledad, Cátedra Letra Hispánicas, pag 195
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